Como cada 16 de octubre, en nuestro país se celebra el Dia del Profesor y Profesora. Este año que a todos nos ha sorprendido, ha logrado que transformemos nuestro comportamiento, nuestro estilo de vida y que la percepción de lo importante también cambie.
Los profesores este año se transformaron en estudiantes, ¡si, en estudiantes! Pues ahora son expertos en clases online por zoom o meet, son unos capos en la edición de videos, la creatividad ha sido su sello en estos siete meses de pandemia, pues ¿Cómo hago para enseñar a leer, sumar y restar de forma remota? O ¿Cómo preparo a mis estudiantes para la PSU?, y bueno, las ideas han surgido. Además, el acompañamiento a los apoderados ha sido un tema muy importante, este ha sido un año muy trabajado y hoy queremos reconocérselos.
La historia de nuestra Escuela Futaleufú y sus escuelas rurales se sigue escribiendo, cada docente aporta con su sabiduría, ingenio y preparación, pero hoy, vamos a compartir con ustedes una pequeña entrevista a dos ex profesoras de la escuela Futaleufú, ambas jubiladas, llegadas a la comuna muy jóvenes, quienes decidieron formar sus familias aquí y que con mucho cariño nos quisieron contar cómo era ser profe allá por el 80 y la historia del Conjunto Folklórico Magisterio de Futaleufú.
El Conjunto Magisterio Futaleufú fundado en el año 1982 cuando era alcalde en la comuna don Juan Manzor y director de la Escuela Futaleufú don Juan Alvarado Cárcamo. Este conjunto se formó con el objetivo de interactuar y participar activamente en la comunidad, conformado principalmente por profesores y profesoras de las escuelas de Futaleufú, que en ese entonces eran Rio Azul, El Espolón, El Límite, Las Escalas y la desaparecida escuelita de Rio Chico. La idea surgió en una reunión de profesores que en ese tiempo no superaba a los 12 docentes. El conjunto estuvo vigente hasta el año 1995 aproximadamente.
Lo que ensayaban y presentaban era música recopilada principalmente desde Chiloé, como el Vals “Bella Elena”, Cueca chilota, el Cielito y distintas guarachas, también tocaban el himno de Futaleufú, música chilena siempre, “no se tocaba en ese tiempo chamamé o música argentina-patagona”, afirman las profesoras.
Algunos de los integrantes del Conjunto Folklórico Magisterio fueron don Adolfo Vidal, Ruth Velásquez, Sonia Mendoza, Juan Alvarado, Miguel Campos, Miriam Calixto, José Navarrete, Conrado Peña, Oscar Latorre, Robinson Montaña, Oreste Ávila, Alfonso Fernández, Betty Asenjo, Gerardo Llancapani, Patricia Law, Lorenzo Oñate, Wilma Mancilla, Olivia Ortega, Mario Morán y Beto Morán, Arístides Sepúlveda, Pedro Álvarez, más tarde se integraron don Enrique González y Genaro Retamal.
En la comuna se presentaban en las fiestas del pueblo, también viajaban a las demás comunas de la provincia a reunirse con los otros conjuntos de profesores. “Lo que más recuerdo es que nos invitaban a tocar y presentarnos en distintas ceremonias en el consulado de Esquel, para la comunidad chilena que estaba presente en el lugar”, afirmaron.
“Disfrutamos, compartimos, existía mucho respeto y compañerismo, nos llevábamos super bien y cada idea era siempre recibida de la mejor manera por todos los colegas”, afirmó la profesora María Honoria Velásquez.
“Para poder comprar el vestuario del conjunto y los distintos instrumentos como, guitarras, acordeón, bombo, tormento, pandero y todo lo que necesitábamos, en ese tiempo hacíamos café concert y participábamos con obras chilotas. Una vez nos presentamos con la obra “El Reitimiento”, entonces todos los profes nos repartíamos el trabajo, algunos vendían las entradas, entre todos hacíamos la comida, freíamos los chicharrones de las tortillas, en fin, hacíamos todo…En esa oportunidad Don Mario Morán se lució, lo hizo tan bien, todos nos reíamos, el pueblo entero lo disfrutó mucho”, mencionó la profesora Cecilia Vera.
Tenemos muchas anécdotas, muchas de ellas muy chistosas, fueron buenos tiempos. Gerardo solía decir; “no se puede cambiar el libreto, no cambien-ni la i ni la a”, pero en el momento de estar en el escenario, cada uno fluía y dábamos lo mejor de nosotros, dijeron las profesoras, colmadas de risas y emoción, de recuerdos y de nostalgia.
Hoy todo ha cambiado, y lo seguirá haciendo, con esta pandemia aprendemos día a día, pero sin duda en las mentes de nuestras niñas y niños este año será tan sólo un recuerdo y de seguro, en el estarán presentes sus profesores y profesoras, sus consejos, su compañía a la distancia y su preocupación constante, así como en el recuerdo de quienes hoy son adultos, se encuentran los consejos y lo enseñado por estas dos profesoras, que hoy nos contaron un poquito de la historia de nuestro pueblo.
¡Feliz Día a todas las profesoras y profesores de Futaleufú, a los de ayer y a quienes ejercen actualmente!